Los republicanos promoveremos un proyecto integral para el Camp d’Elx que afronte sus problemas de forma sostenible
Los republicanos promoveremos un proyecto integral para el Camp d’Elx que afronte sus problemas de forma sostenible

El MUP-Republicanos reclama que el Ayuntamiento asuma la defensa del pequeño productor, facilitando la colaboración y la colocación de sus producciones en el mercado. Con ese objetivo, los republicanos proponemos un Plan integral de desarrollo del Campo, para asegurar la supervivencia y el desarrollo sostenible del campo, compaginando los usos turísticos, agrarios y culturales a través de la intervención e intermediación del Ayuntamiento. Para ello, el MUP-Republicanos impulsará la formación de un Cinturón Rural Verde. Mediante la concentración de parcelas abandonadas o en riesgo de serlo, se establecerán en ese cinturón plazas de albergue y acampada compatibles con el medio y dedicadas al turismo rural y actividades relacionadas.

Parte de las parcelas podrán ser dedicadas a usos culturales y educativos (horticultura escolar), al ocio (a modo de “huertos urbanos” a disposición de los ciudadanos), a actividades medioambientales, etc.
Por otro lado, desde el MUP-Republicanos apostamos por la creación de un Servicio de Promoción de la Agricultura Ecológica, que impulse la formación de una red de contacto entre productores, vendedores y consumidores de este tipo de agricultura, con distintivos para los establecimientos que comercialicen este tipo de productos. En consonancia con lo anterior, declararemos nuestro territorio como Municipio Libre de producción transgénica, dada la falta de control sobre las investigaciones desarrolladas en este ámbito y la imposibilidad de impedir  la contaminación genética de los cultivos circundantes.
No cabe duda de que el Camp d’Elx destaca por sus especiales condiciones para la agricultura, con productos tan destacados y apreciados a escala mundial como la granada mollar. Sin embargo, es preciso que las administraciones asuman la defensa del pequeño productor, facilitando la colaboración y la colocación de sus producciones en el mercado, y promoviendo una orientación de la agricultura que permita afrontar con éxito los retos que plantea la situación actual, atendiendo la posible demanda desde una perspectiva basada en la distinción, la calidad y la seguridad. Y el  Camp d’Elx, insistimos, posee las características adecuadas para ello.
• Es necesario dinamizar el  Camp d’Elx, y hacerlo de forma sostenible, que asegure su explotación y disfrute para las generaciones futuras, teniendo en cuenta que nuestro medio rural no sólo es “suelo”, como lo concibe la derecha, ni siquiera es solamente un recurso productivo: constituye, asimismo, un valor natural y ambiental que es necesario preservar para garantizar el ocio y el bienestar de todos los ilicitanos.• Con ese objetivo, promoveremos un Plan integral de desarrollo del Campo, de tal modo que sea posible asegurar la supervivencia y el desarrollo sostenible del campo y el freno a su desertización, haciéndolos compatibles con el descanso de los ilicitanos en un entorno agradable y el acceso a la vivienda, y compaginando los usos turísticos, agrarios y culturales a través de la intervención e intermediación del Ayuntamiento.- En primer lugar, para frenar el abandono de las parcelas agrícolas, por falta de rentabilidad (bajos precios, coste del agua…).- En segundo lugar, para responder, de manera sostenible, a las necesidades reales de vivienda y de ocio, que en las décadas pasadas se tradujeron en una edificación  incontrolada de nuestros campos.

– En tercer lugar, para promover la investigación agronómica y la agricultura ecológica, aprovechando las bondades de nuestro clima y suelo.

• Para ello, impulsaremos la formación de un cinturón rural verde, mediante la concentración de parcelas abandonadas o en riesgo de serlo. Para responder a la posible necesidad de vivienda, esas parcelas podrán ser obtenidas canjeándolas por vivienda pública: utilizando un coeficiente que permita intercambiar ese suelo rústico por el equivalente en suelo cedido a cooperativas de vivienda, la parcela cedida redundará en la obtención de parte de una vivienda, que deberá ser destinada a uso efectivo y no a la especulación. Para que los trabajadores ilicitanos puedan disfrutar asimismo de un descanso asequible, desincentivando la construcción ilegal de segundas residencias, estableceremos en ese cinturón plazas de albergue y acampada compatibles con el medio y dedicadas al turismo rural y actividades relacionadas. Por último, parte de las parcelas podrán ser dedicadas a la innovación agraria y a proyectos de agricultura ecológica, a usos culturales y educativos (horticultura escolar), al ocio (a modo de “huertos urbanos” a disposición de los ciudadanos), a actividades medioambientales, etc.

• Dado que el futuro del  Camp d’Elx está, según los motivos ya expuestos, en desarrollar una agricultura ecológica, que pueda competir con otras zonas en términos de una mayor calidad de los productos, delimitaremos una parte del término municipal, de acuerdo con las organizaciones agrarias, sindicales, ecologistas y vecinales, para que sea dedicada a este sistema de producción.

• En esa misma dirección, eximiremos del pago del IBI de naturaleza rústica a los terrenos dedicados a la agricultura ecológica.

• Estableceremos un Servicio de Promoción de la Agricultura Ecológica. Impulsaremos la formación de una red de contacto entre productores, vendedores y consumidores de este tipo de agricultura, y distintivos para los establecimientos que comercialicen este tipo de productos.

• Dadas las dificultades que impone el minifundismo en nuestro término, fomentaremos la agrupación de agricultores para poder cumplir con las condiciones de la agricultura ecológica y promoveremos el conocimiento de otras producciones que, sin poder ser denominadas como tales, no incorporen productos fitosanitarios en sus parcelas.

• En consonancia con lo anterior, declararemos nuestro territorio como Municipio Libre de producción transgénica, dada la falta de control sobre las investigaciones desarrolladas en este ámbito y la imposibilidad de impedir  la contaminación genética de los cultivos circundantes.

• Promoveremos el consumo de los productos locales, con el fin de favorecer el desarrollo agrícola y sostenible del  Camp d’Elx, y para reducir el consumo de transportes y embalajes.

• Impulsaremos la marca  Camp d’Elx para todos los productos del campo ilicitano, subvencionando una etiqueta que acredite el cumplimiento de las normas exigidas y que permita al consumidor elegir productos de su entorno más cercano. Se fomenta, así, la producción tradicional, el sabor del producto y la cercanía.

• Abasteceremos las escuelas infantiles municipales, preferentemente, con alimentos de nuestro término y procedentes de nuestra agricultura ecológica. Promoveremos convenios para que así suceda también en el resto de centros educativos del municipio.

• Promoveremos la Denominación de Origen para la granada mollar, frente a la resistencia que está realizando la Conselleria.

• Promoveremos la construcción de un matadero público en Elche.

• Impulsaremos la agroindustria para la transformación de los productos agrarios locales, tales como la granada mollar o el melón de Carrizales.

• Promoveremos la recogida de los restos de poda en el campo y otros restos orgánicos, mediante los servicios municipales, con el fin de destinarlos a compostaje o a la producción de combustible, y reduciendo de paso el peligro de incendios y el tiempo que deben dedicar los agricultores a deshacerse de estos restos.

• Dicha transformación de los restos tendrá lugar en una planta situada en el término municipal que proporcione empleo de calidad, y cuya localización deberá ser decidida mediante el acuerdo con las partes interesadas.

• Promoveremos el turismo rural, e impulsaremos la rehabilitación, cesión y/o adquisición municipal de las edificaciones rurales tradicionales, con ayudas directas, rebajas o moratorias fiscales, y orientación por el Ayuntamiento.

• Fomentaremos el ahorro de agua, modificando la normativa sobre superficie necesaria para construcción de depósitos de recogida de aguas pluviales en el campo, y proporcionando los servicios municipales para la elaboración de proyectos de construcción de dichos depósitos.

• Promoveremos la ayuda pública a aquellas explotaciones que mejoren su eficiencia energética mediante el uso de energías renovables.

• Crearemos un Consejo Municipal, cuyas decisiones tengan auténtico peso en la política municipal, que permita dirimir las cuestiones particulares sobre la ordenación del territorio y en relación con la construcción en el campo para casos de especial arraigo. Promoveremos la participación y la organización de la población del campo en los asuntos municipales.

Otras medidas:

• Elaboración de un censo de las parcelas abandonadas, que sea actualizado con continuidad.

• Establecimiento de un banco de tierras municipal, para facilitar que agricultores jóvenes o en activo puedan arrendar o comprar las parcelas abandonadas.

• Planificación de las zonas del término municipal que se deberán dedicar a la agricultura en los próximos 30 años, al objeto de proporcionar seguridad a quienes deseen invertir en la agricultura ilicitana.

• Promoción de ayudas de las distintas administraciones a explotaciones agrarias en perfecto estado de cultivo, en correspondencia con su valor como pulmón verde.

• Plan anual de mejora de los caminos municipales que son de propiedad municipal, y de limpieza de los caminos en general.