a Asociación Pateras de la Vida para el Desarrollo y la Cultura y la Red Chabaka de Asociaciones del Norte de Marruecos siguen con inquietud la ola de redadas policiales contra los emigrantes africanos en las periferias de Rabat y Tánger, durante las Navidades; como resultado de estas razzias ilegales, decenas de mujeres con bebés y personas adultas están en condiciones pésimas, a la espera de su deportación hacia la frontera de Argelia.
Ante los hechos sucedidos, ambas organizaciones declaran lo siguiente:
- Su rechazo a la política de acuerdos de readmisión firmada entre Marruecos y la Unión Europea.
- Denuncian las redadas policiales contra las mujeres y sus bebés, que contradicen algunas cláusulas de la Ley de Extranjería marroquí 02_03.
- Exigen el respeto de los derechos de los migrantes procedentes de África subsahariana, procurándoles un espacio de vida digna y reconocimiento de su derecho a vivir como personas, y no tratarles como moneda de cambio en las relaciones África-Unión Europea.
- El reconocimiento y el respeto de los derechos de los refugiados, según los contenidos de la Convención de Ginebra (1951), ratificada por Marruecos.
- El cese inmediato del papel de gendarme que juega Marruecos en la frontera sur del Mediterráneo, convirtiendo la vida de muchos emigrantes africanos en un limbo jurídico que obliga a algunos de estos inmigrantes a mendigar y prostituirse en las calles de las grandes ciudades de Marruecos, como únicas alternativas para sobrevivir.
- El respeto del derecho de las personas migrantes a la cobertura sanitaria y la inscripción en el Registro Civil de los hijos de los migrantes africanos nacidos en el territorio marroquí, para que tengan acceso a una identidad y a gozar de los derechos civiles igual que los ciudadanos marroquíes.
- Por último, insistimos en el cambio del trato policial hacia el fenómeno migratorio a un trato humano, que garantice los derechos humanos de las personas migrantes en nuestro país, considerando que la política de cierre de frontera está condenada al fracaso mientras no se profundice en las causas de esta lacra que empuja a miles de personas a abandonar su tierra en busca de una vida mejor, cosa que no conseguirán, y a enfrentarse a la muerte durante estos flujos migratorios.
Tánger, 29/12/2010